lunes, 11 de abril de 2011

El Padrino I (papel estratégico)

Aunque parezca mentira, El Padrino es un auténtico manual sobre un estilo de vida autoritario. Refleja la cultura italoamericana en sus orígenes y cómo ha ido evolucionando hacia posiciones más sociables pero estrictas. Como muestra Michael Corleone, su visión era más objetiva que la de su predecesor, no toleraba la subjetividad del amor, honorabilidad y la compasión. Todo, absolutamente todo, era un sistema económico, todo era acierto-error, pérdida-beneficio y recompensa-castigo.

El nuevo Don no quiso seguir su referente paternal y sus ideas. Tenía una única misión, crear una empresa descomunal con diferentes líneas comerciales y para ello tuvo que sacrificar todos los valores inculcados y cambiar el eje del negocio. Ahora no eran necesarios los valores como la nobleza y el respeto sino que era más importante la eficiencia, jerarquía y organización empresarial para obtener de todo el máximo beneficio. Rentabilidad ante todo, y para ello, su empresa debía dejar de ser ilegítima. Una empresa con todo en regla generaría más beneficios y esa era su misión. Su visión, consistía en ser uno de los grandes.

Con la ayuda de los mejores profesionales de cada materia, se basó en estrategia pura y dura para tomar decisiones y sacrificó la posición de la familia en los negocios para adaptarlos a la nueva necesidad, un negocio en función de las leyes del mercado. Todo esto se resolvió en un oligopolio como es el juego, controlado por él. Además, gozaba de una posición privilegiada en el sector inmobiliario, los contactos comerciales a nivel global, la construcción, las finanzas y hasta llegó al mismísimo Vaticano, que como se aprecia en El Padrino III, estaba nutrido por la mafia. Tenía el perfil de gerente ideal puesto que controlaba la estrategia y se valía de la prospectiva anticipándose a las demandas del mercado.

Como se puede ver, El Padrino es todo un estímulo cultural en todos los aspectos. Trata la literatura, pues se basa en ella; trata el arte, pues es una muestra en todos los sentidos; y trata el cine desde todas las perspectivas. Creó cultura y seguirá siendo un referente y modelo de estudio durante muchos años.

domingo, 3 de abril de 2011

El Padrino I (papel económico)

Ejemplos como el de El Padrino son los que motivaron la sabia idea que se tenía sobre el término mafia, sus funciones y su impacto social, pero como se puede ver en la última parte de la saga, nuevas prácticas comerciales limpiaron los restos del desastre creado años antes.

La organización de Corleone, poderosa donde las hubiera, seguía avanzando y seguía necesitando de la violencia para garantizar su continuidad. Su estructura seguía siendo jerárquica vertical, con un sumo jefe y trabajadores a sueldo a modo de capataces, asesinos, ejecutores de acciones… Puesto que se estaba diversificando su labor, actuando en varios sectores económicos, vio la necesidad  de recurrir a los mejores profesionales de cada área.

Cuando acabó la Segunda Guerra Mundial, hubo un cambio considerable en la sociedad. El ámbito cultural había sufrido una grave recesión, el sociopolítico y económico habían resultado muy dañados y la sociedad en general estaba en un momento muy crítico. Sin embargo, los negocios de Don Vito Corleone seguían en marcha a pesar, de que lógicamente, sufrieron un estancamiento debido a que el resto de familias no coincidían con el reparto de mercados que se había hecho años antes a propuesta de Don Vito.

Es en esta época cuando aparece el negocio de la droga, que tanta fama le daría posteriormente a las organizaciones mafiosas y que tal vez fuera el punto que más la vinculara con la cultura en general. Sobre el tema de la droga procedente de la mafia se han escrito millones de libros, se han hecho infinidad de películas y se ha expresado artísticamente hasta la saciedad. En el caso de El Padrino, era un negocio del que no quería sacar partido puesto que no le interesaba a pesar de los consejos del resto y de los pingües beneficios que generaba. No obstante, era algo a tener en cuenta puesto que podía afectar directamente a sus líneas de negocio.

Después de un tiempo y la sucesión de la empresa a manos de Michael Corleone, hijo menor de la familia, se dio la necesidad de cambiar el rumbo de las actuaciones. La falta de conocimiento de las demás familias de la persona que asumía el mando provocó que no se le respetara, lo cual, lógicamente pasó factura a la institución. El negocio sufrió un estancamiento y existía, obviamente, la opción de bancarrota, que pudo suponer la muerte de la familia. Es aquí donde se vio la necesidad de vincular sus trabajos a la cultura en un fiel reflejo del papel de la mafia en la sociedad en la vida real, favor que la cultura le devolvería posteriormente en forma de literatura, cine y arte.